jueves, 5 de enero de 2012

Los Reyes Magos

Mañana vienen los Reyes Magos. Cuando era niño, mis padres solían esconder pistas por toda la casa, y mi hermano y yo, emocionados, tratábamos de descifrarlas en busca del lugar en que sus Majestades habían escondido nuestros regalos. Mirábamos bajo las plantas, subíamos la escalera estrecha que conduce a la azotea, buscábamos entre las hojas de los naranjos, en la hierba mojada del jardín, en las cerámicas de la chimenea... Cada pista nos acercaba poco a poco al milagro. Que tres sabios mazdeístas vinieran en camello desde Persia, Babilonia y Asia a Dos Hermanas para regalar cosas a dos pequeños zoquetes no era ninguna extravagancia que nos hiciera sospechar. Mientras más mágico e inaudito resultase, más real parecía. Para una mente que aún no ha sucumbido a la negatividad del mundo, nada más lógico que el hecho de que lo increíble suceda. Y al contrario: nada más incomprensible que la persistencia de lo negativo. Mañana, al despertarnos, tal vez vuelva, como otras veces, un breve recuerdo de aquella insólita magia: cuando, en casa de mis padres, mis sobrinas abran los regalos con los ojos luminosos, mientras, afuera, en el campo, comienza a brillar el rocío sobre las hojas temblorosas de los olivos.

11 comentarios:

Nicolás Fabelo dijo...

Bonita entrada, Alejandro. La ilusión del día de Reyes nunca muere: se transporta de generación en generación, saltando de unos ojos luminosos a otros. Todos ellos aparentemente iguales, como el brillo del rocío sobre las hojas temblorosas de los olivos.
Un abrazo y feliz año.

Fernando dijo...

¿Dos Hermanas? Pensé que eras de Sevilla capital.

Feliz año, en todo caso.

Alejandro Martín dijo...

Nací en Sevilla capital, pero me crié en el pueblo de Los del Río, Melody (la del baile del Gorila) y Carlos Jesús (el del fiú fiú)... Así voy... :-)

Alejandro Martín dijo...

Y Feliz Año a todos...

Anónimo dijo...

Vas a volver, ¿verdad?

Alejandro Martín dijo...

Siempre estoy volviendo
:-)

Fernando dijo...

Gracias por la aclaración, Alejandro.

Adaldrida dijo...

Yo en la Noche de Reyes, creo. Y hasta sangro de la nariz de la emoción. Me vuelvo niña.

pseudopodo dijo...

Alejandro, que también es el pueblo de Gloria van Aerssen...

http://undomingodesol.tumblr.com/post/67523124/cronicas-de-sociedad-mi-pueblo

Feliz Año

soy... dijo...

Leí por algún blog lo siguiente

De niños creemos en los reyes magos, de adolescentes no creemos en los reyes magos, de adultos SOMOS los reyes magos... ¿Por qué te disfrazas de Albayalde, aquién quieres engañar Baltazar?

Saludos y feliz año.

Gracias.

Andrés Martín dijo...

Hay pruebas documentales de que el milagro se produjo, de nuevo, como cada año:

http://losdiasdiminutos.blogspot.com/2012/01/ya-vienen-los-reyes-magos.html